jueves, 31 de marzo de 2016

Sin rumbo fijo

Playa SiriaCamina, camina, y no para de caminar, a veces Fátima para a pensar en su madre y en sus hermanos, pero su padre le recuerda con sus lágrimas que eso es parte del pasado.
Los rumores dicen que hay un lugar en el que la esperanza se hace tangible, y el olor a pan recién horneado no solo aparece en los sueños.
Divagando por tierra de lobos, cada pisada en el suelo se convierte en un paso más lejos de su hogar y un paso más hacia la muerte. 
El agua se enfada y ya no sacia gargantas, ahora se lleva vidas para arrastrar las muertes a la orilla.
Con suerte si la muerte no le escoge, barrigas con bigote y puros le robarán la esencia de la vida, haciéndole pensar, que quizá el mar habría sido la mejor salida.

2 comentarios:

  1. Escritos como este tienen su mejor salida:siendo testimonio, no importa si la ficción se entremezcla con la realidad. Saludos.

    http://www.venitecuento.blogspot.com

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